Demasiada gente piensa que recibir una inyección es doloroso, pero no tiene porque ser así, la persona que sabe como dar una inyección no le provoca dolor a nadie.
Aprende que una aguja hipodérmica no es más que un tubo de acero afilado con precisión, unido a un embudo de plástico o acero.
Observa como es el filo de las agujas para tenerlo en cuenta la próxima vez que inyectas a alguien.
Antes de seguir con los pasos para aplicar la inyección asegúrate de tener puestos guantes descartables para evitar infecciones. Y comprueba que la aguja no tiene daños y es fuerte.

Inyección subcutánea o intradérmica

Desinfecta el área de destino de la inyección con un poco de alcohol, y haz lo mismo con tus dedos y pulgares.
Carga la jeringa con la cantidad correcta de la sustancia que se inyecta.
Pellizca suavemente la piel en la zona donde vas a dar la inyección con la mano libre.
Levanta la piel hacia arriba y observa la siguiente imagen.

Inyección Intramuscular

Sujeta la carne con tu mano libre.
Inserta en la piel rápidamente, sin problemas y sin dudas, y sigue adelante hasta la la aguja haya penetrado a la profundidad deseada.
Suelta la piel/musculo y usa el pulgar e índice de tu mano libre para tomar la parte frontal de la jeringa, por lo que tu mano ocupada puede mover hacia atrás el émbolo
Tira del émbolo para asegurarte de que no has llegado al vaso sanguíneo. Si la jeringa no saca sangre, lentamente presiona el émbolo.
Una vez que la dosis se ha administrado, presiona hacia abajo sobre el sitio de la inyección y retira la aguja rápidamente, pero con cuidado.