La vacunación gratuita de las niñas de 11 años contra el Virus de Papiloma Humano (HPV) deja atrás el impedimento económico que significaba el alto costo de la vacuna en la lucha contra el cáncer de cuello útero, pero los médicos destacan la necesidad de continuar con los controles ginecológicos para evitar infecciones de transmisión sexual.

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció el miércoles la incorporación de la vacuna contra el (HPV) al Calendario Nacional de Vacunación en forma gratuita, para las niñas de 11 años, debido a que en Argentina mueren cerca de 3000 mujeres por año por cáncer de cuello de útero causado por HPV.

Sergio Provenzano, jefe de la División Ginecología del Hospital de Clínicas y del departamento de Tocoginecología de la Facultad de Medicina de la UBA, opinó que "la decisión del Gobierno logra que la mujer llegue a una vacuna de importancia y hará que se reduzca su costo en el mercado, que impedía el acceso a todas".

Provenzano explicó que "hay dos vacunas disponibles en el país contra el HPV, ambas requieren la aplicación de tres dosis y una de ellas cuesta 1.100 pesos cada dosis y la otra 370 cada una".

"Con lo cual la población que estaba accediendo a la vacuna era la que tiene recursos económicos, dejando de lado a la otra, a pesar de que se observó que en condiciones de carencias aumenta el grupo de riesgo de HPV", puntualizó el especialista.

No obstante, destacó la necesidad de "hacer hincapié en que con la vacuna contra el HPV, no se eliminan los controles ginecológicos, ni las relaciones sexuales sin protección".

Provenzano insistió en que "la realización periódica del papanicolau continúa siendo fundamental para la detección de enfermedades en las mujeres y es prioritario, el uso del preservativo cuando se mantiene una relación sexual".

"Porque venimos peleando contra el VIH y otras infecciones de transmisión sexual en la que esta vacuna no tiene incidencia, por lo cual el mensaje de continuar con el cuidado médico y la protección ante una relación sexual, deben quedar claro", remarcó.

En cuanto a la edad de 11 años para la aplicación de la vacuna contra el HPV, consideró que "se basa en una investigación realizada, que toma a esa edad en adelante para aplicar la primera dosis, amparándose en la idea en que aún no hubo relación sexual y que la vacuna es 100% efectiva en esas condiciones".

Explicó que "el 95% de los casos de cáncer de cuello de útero, son causados por el HPV transmitido por relaciones sexuales" y añadió que se aconseja "después de la última dosis de la vacuna, dar un refuerzo a los seis y siete años".

Provenzano destacó el trabajo a nivel nacional en la prevención del HPV y apuntó que "el Conicet, el Hospital de Clínicas y el Ministerio de Ciencia están trabajando para producir una vacuna propia, pero para llegar a ella hay que probarla previamente en población viva y se tardará por lo menos cinco años más".

En otro orden, el viceministro de Salud de la Nación, Máximo Diosque, anticipó que "la semana que viene" se reunirá la Comisión Nacional de Inmunizaciones, para definir que "vacuna contra el HPV comprará el gobierno y llegar a un consenso sobre la aplicación de las tres dosis".

Diosque explicó que esa comisión integrada por expertos de las 24 provincias en inmunizaciones y representantes del Ministerio de Salud y sociedades científicas "evaluará tomando a la edad de 11 años para aplicar la vacuna en mujeres, si debe darse la segunda dosis de la vacuna al mes de la primera y la tercera a los seis meses o dar la segunda a los dos meses y la tercera a los seis".

El funcionario señaló que la elección de 11 años "es conveniente porque en el calendario de vacunación se prevé aplicar a los 11 la vacuna triple bacteriana acelular y contra la hepatitis B".

En cuanto a la forma de compra, se inclinó por la idea "de hacerlo a través del fondo rotatorio de la OPS, para garantizar menor costo y abastecimiento de vacunas".

Diosque manifestó su satisfacción de que "la vacuna contra el HPV llegue a todas las niñas del país, sobre todo por su alta incidencia, que hace que haya en el país 3.000 nuevos casos de cáncer de cuello de útero por año por el Papiloma Humano".

Pero también insistió en la importancia "para su detección en la realización del papanicolau y la consulta ginecológica de rutina, para que en el caso de que se detecte HPV, se pueda llegar a tiempo con el tratamiento".